Conservamos lo que el balón anota y el corazón decide

Sin desperdicio

Sin desperdicio

Por Arturo Santillán

@ortegasantillán

 

El día 13 de competencia decepcionaba con el primer cero a cero del torneo, Francia y Dinamarca prefirieron olvidar por 90 minutos de qué se trata esto de los mundiales, administrados para la ronda de octavos. Demasiado sacrificio para todos en un estado excepcional de 31 días, que les aproveche.

Perú pensó en todo lo contrario, con la causa de avanzar a octavos perdida, pero con el sueño cumplido de una generación creyente de que nunca estarían en un mundial, salieron a desahogar el contenido grito de gol durante 36 años. Guerrero personificó la conclusión de una complicada historia de obstáculos que tuvo un final feliz, así como la de todo el derrotero peruano. El equipo inca consiguió materializar en una histórica victoria contra Australia el buen juego que ofrecieron durante sus dos primeros partidos.

La segunda parte del día entregó otra historia, solo Croacia tenía algo seguro, Nigeria, Islandia y Argentina debían pelearlo y lo hicieron hasta el último respiro. A pesar de ser partidos de fase de grupos se jugaron dos finales con lo única certeza de que estas no contarían con tiempos extras o definición en penales. Los croatas se guardaron poco, jugaron a ganar, avanzaron con nueve puntos, cinco por arriba del segundo lugar, Argentina.

Con agonía, con polémica, con Maradona más su cuestionable comportamiento, pero con gol de Messi más gol al minuto 86 Argentina avanzó, y lo celebró junto a medio mundo, ese segmento de población terrenal que no se imaginaba el resto del mundial sin las virtudes de Lionel en la cancha.

El juego argentino se mantiene sin forma, sin dirección, prácticamente sin idea, esa fue la impresión durante la fase de grupos. Ahora ya está en octavos, con la obligación de no desperdiciar un minuto más en la Copa del mundo, enfrentará a una Francia que sí se dio el lujo de desperdiciar noventa.